Capítulo V

Sri Chaitanya Bhagavata — Adi Lila



Todas las Glorias, todas las glorias a la Personalidad Suprema, Sri Viswambara, el Señor Chaitanya. El es el Supremo Señor de Señores y Sus pies están decorados con las marcas de la bandera, el rayo, el acicate, etc.

El Señor Supremo llevó a cabo varios pasatiempos trascendentales mientras residió en la casa de Jagannatha Mishra. Un día Sri Jagannatha Mishra llamó a su querido hijo Viswambara, y le dijo: "Tráe mi libro". Nimai se apresuró hacia la casa, al escuchar el llamado de Su padre; las campanillas de sus tobillos sonaron fuertemente con Sus movimientos. Sri Jagannath Mishra se preguntó "¿De dónde viene el repique de cascabeles?." Ambos, él y su esposa Srimati Sachi Devi buscaron por todas partes. "Mi hijo no usa cascabeles. Entonces, ¿de dónde viene ese dulce sonido de campanillas? ¡Qué extraordinario! El padre y la madre consideraron el incidente, pero permanecieron mudos de sorpresa.

Después de traer el libro, el Señor salió corriendo a jugar. Los padres al entrar en casa. vieron otra maravilla. Descubrieron huellas de pies maravillosas, por todos lados, con diferentes símbolos, como la bandera, el rayo el acicate, el festón, etc. Ambos se estremecieron con gran deleite y sus ojos se llenaron de lagrimas mientras examinaban las huellas. Ofrecieron sus reverencias a las pisadas y dijeron: "Seremos liberados; no más nacimientos."

Sri Jagannath Mishra, le pidió a su esposa: "Por favor escucha, Madre de Viswarupa (el hermano mayor del Señor Chaitanya), cocina un sabroso arroz dulce, haz una preparación con gee. En la mañana bañaré a la deidad de nuestra casa, Sri Damodara Sila, con el panca-gavya (las cinco substancias, leche de vaca, yoghurt, gee, orín de vaca y estiércol de vaca). Yo creo que el sonido de las campanillas de tobillos, vino de los pies de la Deidad, que se movía secretamente por la casa. Jagannatha Mishra y Sachimata adoraron contentosel Salagrama Sila, y el Señor Chaitanya en el interior de Su mente, sonreía.

Escuchen ahora otro maravilloso pasatiempo del Señor Chaitanya, el hijo de Sri Jagannath Mishra.

Un brahmán muy piadoso estaba visitando diferentes lugares de peregrinaje para satisfacción del Señor Supremo Krsna. Adoraba al Señor Krsna cantando el mantra de Gopala, el cual consiste en seis sílabas, no comía nada más que los remanentes de la comida ofrecida al Señor Gopala. Después de visitar muchos lugares de peregrinaje, el afortunado brahmán llegó al fin a casa del Señor Chaitanya. Como una persona de incomparable pureza, estaba envuelto en un gran brillo espiritual. Llevaba alrededor de su cuello al Señor Gopala y a Salagrama Sila como sus decoraciones más hermosas. Con los ojos a medio cerrar cantaba constantemente, Krsna, Krsna, y en lo profundo de su corazón saboreaba el amor Divino.

Al ver a esta brillante personalidad, Jagannath Mishra se levantó respetuosamente y ofreció sus reverencias. El más respetable Sri Jagannatha Mishra, hizo todo para atender apropiadamente a su estimable invitado. Personalmente lavó los pies de su invitado y le ofreció un asiento elevado. Cuando estuvo sentado confortablemente, Sri Jagannath Mishra inquirió ¿En dónde vives? El brahmán, replicó; "yo no tengo interés en los tratos del mundo, por eso viajo por diferentes naciones." "Es una suerte para el mundo que viajes por todas partes, me siento especialmente afortunado hoy, por favor permíteme cocinar para ti." El brahmán le contestó; "Querido Mishra, haz como tú desees". Alegremente Sri Mishra hizo diversos arreglos extraordinarios y maravillosos, mandó limpiar a conciencia la cocina y después dispuso que se trajeran los ingredientes para cocinar. El propio brahmán cocinó a su entera satisfacción y se sentó a ofrecer todas las preparaciones al Señor Krsna.

Sri Sachinanda, Chaitanya, es la Superalma en el interior del corazón de todos. Decidió mostrarse a Sí mismo ante el brahmán. Apenas había empezado su meditación el brahmán cuando el Señor Supremo, Sri Gaurasundara apareció ante él. El permaneció allí desnudo, Su forma entera cubierta de polvo. Era del color del sol, con pies y manos hermosos, sonreía. Tomó un puño lleno de la ofrenda del brahmán. A pesar de ser favorecido por la buena suerte, el brahmán gritó "¡Alas! ¡Alas! Este niño inquieto robó la comida de la ofrenda." Cuando Sri Jagannatha Mishra acudió, vio que la Suprema Personalidad de Dios, Sri Gaurasundara estaba sonreía comiendo el arroz. Intentando pegarle al Señor, un Mishra muy enojado le persiguió, pero el brahmán se levantó y asustado detuvo la mano de Mishra. El brahmin dijo: "Mi querido Mishra, eres una persona respetable y educada, pero ¿qué conocimiento tiene un niño pequeño?. ¿Qué lograras pegándole?. Una cosa es pegarle a una persona que puede distinguir entre el bien y el mal, pero te prOh,íbo que le pegues a este niño" Sintiéndose miserable, Sri Mishra se sentó sosteniéndose la cabeza. No dijo una sola palabra, ni levantó la cabeza. "No te sientas triste, querido Mishra" dijo el brahmán. "Con seguridad el Señor Supremo sabe todo lo que ocurre en todo momento. Por favor, trae cualquier fruta o vegetal que tengas en tu casa. Simplemente comeré eso hoy." Sri Mishra dijo: "si me consideras bondadosamente tu sirviente, déjame hacer el arreglo para que cocines otra vez. Solamente me sentiré satisfecho cuando vuelvas a cocinar. Tengo todos los ingredientes necesarios en la casa. Los otros amigos y parientes también le imploraron que cocinara de nuevo. "Ya que todos lo desean" aceptó el brahmán; "Haré cada preparación de nuevo." Todos estaban a gusto de que hubiera aceptado y limpiaron de nuevo la cocina. Reunieron rápidamente todos los ingredientes y el brahmán empezó a cocinar de nuevo. Algunas personas le advirtieron al brahmán que el inquieto niño, podría estropear la ofrenda de nuevo. "Lleven al niño a otra casa y manténganlo allí hasta que el brahmán termine de cocinar y de comer", le dijeron a Sachimata.

Madre Sachi llevó al niño a la casa de un vecino. Todas las mujeres jóvenes le preguntaron: "¡Hey, Nimai!. ¿Es la manera como debes actuar, robando la comida del brahmán?" Con una sonrisa en su rostro exquisito, parecido a la luna, el Señor Chaitanya replicó: "¿Cuál fue mi falta?. El brahmán Me llamó." Pero, ellas objetaron: "Oh, Nimai, ¿harás más travesuras ahora que has perdido tu casta?. ¿Quién conoce a este brahmán?. ¿De dónde viene o cuál es su familia?. ¿Cómo puedes mantener tu casta habiendo comido lo que él cocinó?" El Señor contestó: "¡Yo pertenezco a la casta de los vaqueros!. Y acepto comida preparada por un brahmán, todo el tiempo. ¿Cómo pierde su casta un vaquero aceptando comida de un brahmin?" Diciendo esto, el Señor miró a todos con una sonrisa. El Señor Supremo Sri Chaitanya, usó este truco para explicarles la verdad acerca de Sí mismo, pero Su potencia ilusoria es tan perfecta que nadie pudo comprenderlo.

Mientras lo paseaban, los diferentes vecinos disfrutaban los argumentos del niño. El iba gozoso de unos brazos a otros, y cualquiera que lo sostenía flotaba en un océano de éxtasis.

El brahmán cocinó una vez más, se sentó a hacer la ofenda al Señor Bala Gopal, pero el Señor Gaurachandra, la Superalma, lo sabía todo.

El Señor Chaitanya encantó a todos y dejó su presencia sin ser notado. Sonriendo sin cesar, fue al sitio en donde el brahmán ofrecía su comida. Sigilosamente, el Señor Chaitanya, se llevó a la boca un puñado de arroz y dejó atónito al brahmán tomado por sorpresa. Alarmado gritó: "¡Alas!," "¡Alas!." El niño comió el arroz y desapareció. Sri Mishra enojado tomó una vara y salió en busca del joven Nimai. Quien huyó despavorido y se escondió en una habitación, pero Sri Mishra lo persiguió rugiendo de furia. Sri Mishra decía: "¡Hoy vas a ver!. ¿Cómo pudiste actuar de esa manera tan traviesa?. A pesar de que soy culto y estudiado crees que soy un gran tonto." Sri Mishra continuó: "¿Puede encontrarse en esta casa semejante ladrón?." ¡Con creciente indignación fue tras Nimai!. Las personas de la casa trataron de detener a Sri Mishra para disuadirlo, pero el enojado padre insistió: "¡Déjenme! Hoy le voy a pegar." Su discernimiento entre el bien y el mal no estaba desarrollado a pesar de su avanzada edad; sólo un verdadero tonto puede pegarle a un niño tan pequeño. Por naturaleza, los niños son inquietos, no es verdad que uno puede enseñarles a través de los golpes.

El peregrino corrió al lugar de los hechos y detuvo la mano de Sri Mishra. "Respetable Señor, por favor escúchame. El niño no ha cometido ninguna falta. Lo que esta destinado a que ocurra en un determinado día, ocurrirá. Hoy no estoy destinado a comer la ofrenda de arroz del Señor Krsna. Lo que te estoy diciendo es la verdad confidencial de este asunto."

Sri Jagannatha Mishra bajó la cabeza avergonzado y por la perturbación mental en que se encontraba no podía mirar a nadie. En ese momento, Viswarupa, la Suprema Personalidad de Dios, y la morada de todo el resplandor espiritual, apareció en la escena. Su forma entera era tan encantadora, que no había belleza en los catorce mundos que pudiera igualarlo. Se quedó ahí, la encarnación de todas las potencias espirituales; con un hilo brahmánico cruzando Sus hombros. Apareció como la expansión idéntica de sí mismo, el Señor Nityananda. Viswarupa, estaba ocupado siempre en explicar la esencia primaria de todas las escrituras, el servicio devocional a la Suprema Personalidad de dios, el Señor Krsna.

Encantado por Su forma exquisita, el peregrino lo miraba con la boca abierta. "¿Quién es el padre de esta extraordinaria personalidad?, preguntó. "Es el hijo de Sri Mishra", llegó la respuesta. El brahmán abrazó a Viswarupa muy contento y dijo: "Son virtuosos los padres de un hijo como éste."

Sri Viswarupa se sentó después de ofrecer sus reverencias al brahmán y empezó a hablar un torrente de dulces palabras. "El día se hizo auspicioso y la casa fue bendecida con la buena fortuna, cuando llegaste como invitado." Dijo Viswarupa. "Eres constante y feliz en tu interior; viajas por todas partes con el único fin de santificar la tierra. Es mi gran fortuna tenerte a ti, una buena persona como mi invitado, pero al mismo tiempo, me siento desafortunado de que tengas que irte sin comer. Si un huésped en una casa ha de ayunar, entonces esa casa caerá inevitablemente víctima de la adversidad y el infortunio. Recibo el inmenso placer de verte, pero al mismo tiempo, me duele escuchar todo lo ocurrido aquí." El brahmán dijo: "Por favor no te sientas apenado. Comeré algunas frutas y vegetales. Soy un habitante de la selva. No puedo obtener arroz ni guisados en la selva, así que vivo mayormente a base de frutas, raíces y vegetales, raras veces como arroz à solamente cuando llega a mi camino sin procurarlo. Siento que he comido más de un millón de veces sólo por el placer de verte. Por favor ve y trae cualquier cosa que tengas en la casa à frutas, vegetales u ofrendas y los comeré ahora."

Un Sri Jagannatha Mishra extremadamente deprimido se sentó sosteniéndose la cabeza entre sus manos, sin decir nada a nadie.

Sri Viswarupa dijo: "Señor, eres un magnánimo océano de misericordia, sin embargo me siento inseguro de preguntarte algo. Las personas santas, por naturaleza se sienten conmovidos ante los sufrimientos de otros y siempre están dispuestos a otorgar a otros sentimientos de gozo. Con un pequeño arreglo, puedes cocinar una ofrenda hermosa para Krsna. Eso disiparía todas las miseria de mi familia del día de hoy, y sentiré el máximo placer y felicidad." El brahmán dijo: "Ya cociné dos veces, sin embargo el Señor Krsna no me ha permitido comer. Puedo entender que hoy no estoy destinado a comer. Este es el deseo del Señor Krsna, por ello ¿para qué insistir?. Uno puede tener alimentos en cantidad ilimitada en la casa pero sólo puede comer si Krsna lo permite. Uno puede intentar algo infinidad de veces, pero si no es el deseo del Señor Krsna, fracasará. Son ahora la una y media de la noche, yendo hacia las dos. ¿Es apropiado empezar a cocinar tan tarde?. Por ello por favor no hagas ningún arreglo para cocinar. Simplemente comeré algo de frutas y vegetales."

Sri Viswarupa replicó: "No hay nada malo con la hora. Todos se sentirán complacidos si cocinas." Sri Viswarupa tomó entonces los pies del brahmán y todos lo animaron para que cocinara de nuevo. El brahmán, estaba encantado con Sri Viswarupa, y accedió a cocinar. Todos invocaron el nombre de Sri Hari gozosamente y limpiaron la cocina. Limpiaron rápidamente y mientras tanto, trajeron los ingredientes necesarios. Entonces, el respetable brahmán procedió a cocinar; todos mantuvieron al niño a una distancia segura. Sri Msishra se quedó de pie ante la puerta del cuarto de Nimai. "Amarren las puertas desde afuera para que no pueda escapar;" sugirió alguien. "Bien, bien," aceptó Sri Mishra. "Ese es un buen plan. Amarren las puertas por fuera y nosotros nos quedaremos aquí." Las mujeres en el interior del cuarto de Nimai dijeron: "No se preocupen, Nimai se duerme rápido, no hay nada más que pueda hacer." Mantuvieron al niño alejado y de este modo, el brahmán, termino pronto de cocinar. Ese piadoso brahmán, preparó el plato de la ofrenda con las cosas que cocinó, se sentó a ofrecer todo al Señor Krsna a través de su meditación.

Nimai, el hijo de Madre Sachi, sabía todo. pues El es la superalma en el interior de todos los corazones. Quiso aparecer ante el brahmán y revelarse. Por la voluntad del Señor Supremo, Nimai encantó a todos, quienes quedaron profundamente dormidos. Sri Sachinanda apareció en el lugar donde el brahmán ofrecía el arroz al Señor. Cuando el brahmán vio al joven Nimai, lanzó un llamado de alarma, pero nadie lo escuchó, porque estaban en un profundo sueño. Nimai, el Señor Supremo dijo: "¡Oh, brahmán, tú eres conocido como un alma misericordiosa. Me llamaste y por eso he venido. ¿Por qué debo ser reprendido por ello?. Cantaste mantras para invocarme, me llamaste, así que vine. ¿Cómo podía resistirme?. Meditas incesantemente en Mí; decidí aparecer frente a ti."

En ese momento el brahmán contempló una maravilla visión. El Señor Supremo, estaba parado ante él en Su forma de ocho brazos, sosteniendo en cuatro de Sus manos los cuatro símbolos à la caracola, el disco. El mazo y el Loto, con otras dos de sus manos, sostenía mantequilla y la comía y con las últimas dos, tocaba la flauta. Vio la forma entera del Señor decorada con gemas y ornamentos; Su pecho, estaba marcado con el signo de Laksmi devi, con el signo de Srivatsa y a modo de collar, la inapreciable joya Kaustubha engarzada junto con otras gemas. Su cabeza, estaba decorada con flores frescas silvestres que rodeaban Su pluma de Pavo Real. Sus labios carnosos, se parecían al sol del amanecer, elevándose desde Su suave rostro encendido, parecido a la luna. Sus ojos como pétalos de Loto rosados, sonreían dulcemente. Su larga guirnalda de flores Vaijayanti, -que le llegaba hasta las rodillas- se mecían delicadamente, al igual que sus aretes en forma de tiburón. Sus pies eran como brotes de flores de Loto, decorados con gemas que tintineaban colgadas entre las campanillas de Sus tobillos. El brillo de Sus delicadas uñas, como perlas, disipaba la oscuridad.

El brahmán vio el lugar transformado de inmediato en Vrindavana dhama. Los maravillosos árboles de Kadamba se volvieron un estruendo de trinos de pájaros. Los vaqueritos y las niñas, vagaban por doquier y todo era tal como lo viera en su meditación. Sobrecogido de éxtasis ante tal visión inconcebible, desfalleció. La Suprema Personalidad de Dios, Sri Gaurasundara, quien es un océano de misericordia, depositó sus manos trascendentales sobre el cuerpo del brahmán; recuperó la conciencia con el toque del Señor, pero continuaba mudo e inerte, dichoso. Una y otra vez desfallecía, cayendo al suelo. Algunas veces cayendo y otras levantándose, se movía con emociones espirituales que se incrementaban. Sobrecogido por el arrobamiento, la transpiración y los escalofríos, era incapaz de mantenerse erguido. Sus lágrimas fluían libremente como la Madre Ganga. El brahmán tomó los Pies de Loto del Señor y lloró fuertemente por un rato.

Conociendo la ansiedad del brahmán, el Señor Supremo Sri Gaurasundar habló unas cuantas palabras, sonriendo encantadoramente. El Señor Supremo dijo: "Oh, brahmán erudito, por favor escucha: En muchas vidas pasadas tú has sido Mi sirviente, siempre has meditado en Mí, por eso, Me he mostrado a tí. En mi encarnación pasada aparecí ante tí, en casa de Nanda Maharaja en esta misma forma, pero lo has olvidado. En mi encarnación previa (como Krsna), aparecí en Gokula dhama, y en esa vida, estabas peregrinando por los sitios sagrados, con fervor espiritual sincero. A través de un arreglo divino llegaste como huésped, a casa de Nanda Maharaja y me ofreciste alimentos. En ese encuentro, intercambiamos expresiones afectuosas, tal como ahora. Comí tu ofrenda como lo hice esta noche. Tú eres mi siervo, nacimiento tras nacimiento, por ello, he aparecido ante ti. Nadie, sino mis siervos, pueden verme como Soy. Te estoy confiando estos tópicos confidenciales; no se los reveles a nadie. Mientras Mi encarnación actual permanezca en la tierra, si revelas Mi identidad, te destruiré. Yo hice mi aparición en el lugar donde el canto en congregación del nombre sagrado de Krsna se había iniciado ya, e iniciaré la propagación de ese canto a través del mundo entero. Distribuiré libremente, en todas las casas, el proceso del servicio devocional amoroso hacia el Señor Supremo, el cual, es deseado fervientemente incluso por Brahma y otras personalidades elevadas. Quédate con nosotros por algún tiempo y verás muchas cosas. Pero te prOh,íbo estrictamente, que se las digas a nadie."

El Señor Supremo Gaurasundara, fue hacia la parte trasera de Su habitación, después de derramar Su misericordia sobre el brahmán, dándole tranquilidad. Se acostó a dormir como un niño, en su postura previa. Nadie advirtió nada, debido al sueño profundo, provocado por la potencia mística del Señor.

El piadoso brahmán, se llenó de gran euforia después de contemplar los pasatiempos del Señor. Se untó ese arroz trascendental sobre todo el cuerpo y entonces comió mientras lloraba sin cesar extasiado. Bailó, cantó, rió e hizo sonidos fuertes de rugidos, mientras gritaba: "¡Todas las glorias al Señor Bala Gopala!." Los fuertes rugidos del brahmán, despertaron a todos los habitantes de la casa; así que de inmediato, se restringió de futuros arrebatos de emociones espirituales y limpió su cuerpo. El brahmán comió sin preocuparse y todos se complacieron.

El brahmán consideró el decirles a todos lo que sabía. "Déjenme informarles que el Señor Supremo esta entre ustedes,todos pueden liberarse." Pensó decir: "La Suprema Personalidad de Dios, quien es deseado a través de las oraciones del Señor Siva y el Señor Brahma, ha nacido en la familia de un brahmán." Pero recordó la instrucción del Señor y no le reveló nada a nadie. Temeroso de desobedecerlo, no dijo nada. Supo la identidad verdadera del Señor, pero los otros no advirtieron que tuviera este conocimiento extraordinario. Permaneció feliz al lado del Señor. Pedía limosna en diversos sitios, pero todos los días regresaba a ver al Señor Supremo.

Pasatiempos maravillosos como estos, están revelados en las escrituras Védicas; si alguien escucha estos tópicos, recibe el refugio completo del Señor Sri Krsna. El Adi Khanda está lleno de tópicos nectáreos. Describe cómo la Suprema Personalidad de Dios, Narayana, lleva a cabo pasatiempos gozosos, actuando, sin embargo, como si fuera un niño.

El Señor Supremo Gaurasundara, es la joya máxima de los catorce mundos, y el Señor Supremo del planeta Vaikuntha, los cuales están por encima de este mundo material. Es el Señor Narayana, el esposo de Lakshmi devi. Es también el Señor Ramachandra, el esposo de Sita devi.

En Treta Yuga, Gaurasundara apareció como el Señor Rama, con su hermano menor Sri Laksman (el Señor Nityananada). Llevó a cabo muchos pasatiempos extraordinarios y mató al gran Rey demoníaco, Ravana.

En Dwarupa Yuga. Apareció como el Señor Krsna con Sankarsana, Balarama. Llevando a cabo pasatiempos maravillosos, los cuales aligeraron el peso del pecado en el mundo.

Yo, Vridavan Dasa, ofrezco esta humilde canción a los pies de Loto de Sri Krsna Chaitanya y de Sri Nityananda Chandra Prabhu, quienes son mi vida y alma. Los Vedas, siempre glorifican a dos Personalidades Supremas; al Señor Mukunda (Krsna) y al Señor Ananta Sesa (Balarama). Sepan de cierto que estas dos Personalidades Supremas, han aparecido ahora como el Señor Chaitanya y El Señor Nityananda.
Fín del capítulo V